domingo, 14 de abril de 2019

Cristales de sulfato de cobre(II)

Con el sulfato de cobre(II) se obtienen unos cristales con formas de rombo o trapecio de un azul intenso. Estos cristales son fáciles de preparar por evaporación de la disolución, por lo que no es necesario calentarla mucho.


Preparación de los cristales:

- Teniendo en cuenta que la solubilidad del sulfato de cobre(II) es de 20g/100 mL agua a 25ºC. Prepararemos una disolución con 100 g del producto y 500 mL de agua.

- Calentaremos ligeramente la disolución para asegurarnos de la completa disolución. Es muy recomendable calentar en un vaso de borosilicato, ya que ciertos recipientes metálicos reaccionan con el sulfato de cobre(II).

- Una vez preparada la disolución, se reparte en un par de cristalizadores.

- Con el paso del tiempo aparecerán los característicos monocristales en forma de rombo, aunque también pueden aparecer algunos agregados de éstos.


 Aquí los los tenemos dispuestos por tamaño:


Algunos ejemplos de los agregados formados han sido:



Seleccionando aquellos con mejor geometría, se pueden recrecer por el procedimiento de semillas colgantes.


Se filtran las aguas madres de los cristales y se le añaden 25 g más del producto y se calienta hasta completa disolución. Se añade a un recipiente en el que se sumerge la semilla colgando de forma que quede un poco por encima del centro de la disolución.

Pasada una semana observamos que la semilla ha crecido sustancialmente.


Repitiendo el proceso anterior, podemos recrecer el cristal cuantas veces se desee. A continuación se muestran algunos de los obtenidos.


Estos son sólo el principio. Si se continúa, se pueden obtener cristales de varios kilos si se desea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario